Los burros, por burros que sean, persiguen zanahorias atadas al extremo de una caña sabiendo que nunca las alcanzarán. Si lo hacen es simplemente para mantener sus asnales cabezas ocupadas, evitando así pensar en las cosas que molestan. Al menos eso es lo que yo creo. Exactamente lo mismo nos ocurre a los viajeros con los horizontes: ninguno de los míos hay tan incauto como para no darse cuenta de la materia inalcanzable de la que están hechos. Si vamos en su busca es siempre intentando escapar de las culpas que arrastramos. Al menos eso es lo que a mí me espolea.
Ya desgasté esta ciudad, mis pies me piden nuevas calles que andar
No os lo había dicho nunca antes pero el tema central de la banda sonora para este blog mudo es la versión de los DelTonos del Sweet Lousiana Sound. Ahora ya sabéis por qué.